La incógnita en el mantenimiento del sistema nacional de pensiones y la ruinosa rentabilidad de los planes de pensiones privados, agudiza el olfato de la banca, ofreciendo como alternativa productos complejos como los seguros de renta vitalicia que no están sometidos a la normativa MiFID.
El seguro de rentas vitalicias es una modalidad de los seguros de vida-ahorro en la que una entidad aseguradora, a cambio de una prima única, garantiza al asegurado una renta periódica, hasta su fallecimiento. La rentabilidad ofrecida junto con la bonificación fiscal que ofrece, hace que muchos inversores se interesen, aunque sepan que “el banco no es su amigo”.
Y, ¿Por qué están tan interesados en ofrecer estos productos, aparte de por sus comisiones?
Los bancos están hasta las cejas de bonos del tesoro, que tienen que endosar a alguien como cuando tenían que endosar las preferentes, o acciones convertibles varias. Y leyendo la letra pequeña del seguro de rentas vitalicias…nos encontramos que en algunos casos crean una división de seguros con la confianza del grupo en cuestión, la cual si quiebra o si les apetece, pueden vender tranquilamente. Después, ese seguro crea una renta vitalicia comprando un bono del tesoro al banco que está deseando soltarlo, y te da los cupones en forma de rentas .
Y podemos pensar que casi no hay diferencia entre tener un bono y un seguro. Hay un factor que en su lenguaje puede confundir, pero la cotización de un bono de renta fija… es variable. En los contratos, la banca se asegura de que el importe rescatado nunca podrá superar lo aportado inicialmente. Es decir, por muy bien que marche nuestro bono o nuestra letra del tesoro, nunca podremos ganar más de lo aportado inicialmente.
OBL TESORO PUBLICO- 5,850 % , vencimiento 01/2022
Los problemas surgen cuando el asegurado quiere rescatar sus ahorros anticipadamente, y pueden tener problemas de liquidez, pérdida de deducciones fiscales, y penalizaciones. Habitualmente la banca permite el rescate del dinero depositado, eso sí, con una suculenta penalización y quedando expuestos a la cotización que en ese momento tenga el activo al que irá ‘unido’ nuestro producto (bonos o letras del Tesoro)
Antonio Hernando
Finanzas personales